¡Qué descubrimiento tan asombroso! El agujero negro Sagitario A*, que se encuentra en el centro de nuestra galaxia, parece que no solo es una enorme fuerza cósmica, sino que también tiene una historia fascinante. Los científicos han descubierto que se formó tras la fusión de la Vía Láctea con otra galaxia llamada Gaia-Encelado. Este hallazgo cambia lo que sabíamos sobre cómo se forman los agujeros negros supermasivos y cómo evolucionan las galaxias. ¡Es increíble cómo cada nuevo descubrimiento nos ayuda a entender mejor el universo!